Hoy nuestros chicos y chicas tenían como misión proteger los pequeños brotes de lechuga.
Pues resulta que tenemos algunos bichitos hambrientos que se quieren comer sus hojitas ya que ahora mismo son pequeñitas, tiernas y jugosas.
Esto no lo podemos permitir porque las hojitas necesitan estar sanas para crecer y sobre todo, ¡para poder luego comérnoslas nosotr@s!
Para solucionarlo, les hemos hecho unas casitas con botellas de agua.
Como ya sabéis, nuestro proyecto de Huerto está dentro de un proyecto de Ecoescuela y eso quiere decir que debemos intentar usar contribuir al medio ambiente no malgastando, reutilizando y por supuesto reciclando, en este caso, el plástico.
El plástico es muy contaminante y a las botellas de agua antes de tirarles hay que darles un buen eso. A eso se le llama reusar o reutilizar. Cuando ya no sea posible reutilizarlas tendremos que reciclarlas, como ya sabéis, irán al contenedor amarillo.
Por ahora esas botellas van a tener una segunda vida como casitas para proteger de los bichitos y también del mal tiempo a nuestras lechuguitas. ¿A qué ha sido una buenísima idea?
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